Diagnóstico: Parálisis Cerebral El Camino al Bienestar de Blanca
Una resonancia magnética realizada en su primer día de vida mostró un edema cerebral masivo y parálisis
Cuando Blanca nació, tenía el cordón umbilical enrollado dos veces alrededor del cuello, lo que le provocó asfixia. Fue necesario administrarle oxígeno inmediatamente. Empezó a tener convulsiones poco después de nacer y se le administraron dos medicamentos anticonvulsivos diferentes. Una resonancia magnética realizada en su primer día de vida mostró un edema cerebral masivo. Estuvo ingresada 12 días.
Blanca volvió a casa, pero no tuvo ningún desarrollo significativo. No respondía a nada visualmente. A los 10 meses, una prueba visual confirmó su ceguera cortical. A los 18 meses, cuando la mayoría de los niños ya caminan y empiezan a hablar, Blanca apenas se había desarrollado. Era funcionalmente ciega, sorda, insensible e inmóvil. Era capaz de llorar, pero no emitía ningún otro sonido. Su diagnóstico fue «parálisis cerebral, espasticidad y daño cerebral». A sus padres les dijeron que podría mejorar, pero que nunca tendría una vida normal.
Sus Padres escucharon sobre el curso “Qué hacer por su hijo con lesión cerebral”
Inmediatamente hicieron planes para asistir al curso. Sus padres empezaron con un intenso programa de estimulación visual, auditiva y táctil. Colocaron a Blanca en el suelo inclinado para que se moviera lo antes posible.
Iniciaron un excelente programa de nutrición con Blanca para darle la mejor fisiología posible. Blanca hizo progresos asombrosos en el primer año de su programa. Empezó a ver y fue capaz de reconocer a sus padres, así como fotografías por primera vez. Los padres iniciaron entonces un programa de lectura, que a Blanca le encantó.
Tras iniciar un programa de estimulación auditiva, empezó a oír sonidos en su entorno. Empezó a entender palabras y a responder a instrucciones. Los padres veían ahora a una niña consciente de su entorno y receptiva a las personas. Estaba superando sorprendentemente bien el diagnóstico de parálisis cerebral.
Blanca empezó a gatear desde el suelo inclinado y a pasar al suelo plano. Luego empezó a ponerse a gatas para arrastrarse. A continuación, el personal de Los Institutos trabajó con los padres para conseguir que Blanca se pusiera de pie.
Blanca, con la ayuda de la escalera horizontal, empezó a aprender a andar. Todos los días caminaba cientos de metros por debajo de la escalera.
Ahora que la vista y el oído de Blanca eran excelentes, sus padres pudieron empezar un programa intelectual completo en casa. Este incluíaun programa de conocimientos enciclopédicos y un programa completo de matemáticas.
Blanca supera el diagnóstico de parálisis
La niña, que antes era ciega funcional y sorda, ahora lee y comprende por encima del nivel de su edad.
Después de ver miles de palabras, así como muchos libros creados por sus padres, Blanca empezó a leer de forma independiente. Ahora lee en español, ¡e incluso en inglés! Le encanta leer y aprender más cosas sobre el mundo. La niña que una vez fue funcionalmente ciega y sorda y etiquetada con parálisis cerebral ahora lee y entiende por encima de su nivel de edad.
Blanca ahora dice miles de palabras y habla con frases.
Cuando Blanca empezó el programa, sólo podía llorar, pero ahora con un excelente y consistente programa fisiológico, intelectual y físico, empezó a hablar. Blanca ahora dice miles de palabras y habla con frases. Puede decir de 3 a 5 frases a la vez.
Todo el caminar debajo de la escalera horizontal valió la pena. Blanca dejó la escalera y ahora camina de forma independiente. Empezó a andar tanto dentro como fuera de casa.
Blanca llegó a caminar más de un kilómetro en una sesión. Empezó a saltar y ahora está a punto de empezar a correr por primera vez.
Para mejorar su competencia manual, Blanca empezó a colgarse de una barra. De este modo, adquirió fuerza en las manos y los brazos y mejoró su capacidad para utilizar las manos. Ahora puede colgarse durante largos periodos y le encanta.
Cuando Blanca hace algo nuevo, mis hijos se ponen muy contentos, ¡incluso más que yo! Saben que sus objetivos y sus victorias son sus victorias.
Blanca no hace su programa de tratamiento sola. Toda la familia, incluidos sus cuatro hermanos y hermanas, trabajan con Blanca cada día para ayudarla a seguir progresando. En la última visita de Blanca, su madre comentó: «En mi opinión, las mejoras de Blanca se deben a su duro trabajo diario y a mi dedicación, pero tengo que decir que la familia es lo más importante. Mis hijos conocen perfectamente su programa, entienden mi dedicación, y comprenden y consideran esto nuestra vida normal. Quieren que Blanca mejore, y cuando hace algo nuevo o cuando consigue sus objetivos, se ponen muy contentos, ¡incluso más que yo! Saben que sus objetivos y sus victorias son sus victorias. Eso es muy importante. No quiero decir que si la familia no participa en el programa no funcione, pero si la familia participa los resultados son excelentes. Estoy orgullosa de mi familia. Adoran a Blanca».
Al recordar la experiencia de Blanca en el programa, su madre dice: «Sin Los Institutos Blanca estaría inmóvil, ciega, no hablaría, no andaría, no leería y no seríamos tan felices como somos».
Los Institutos felicitan a Blanca y a su maravillosa familia por su duro trabajo y su asombroso logro.